La Secretaría de Salud (SESA) del Estado de Querétaro se adhiere a la conmemoración del Día Mundial del Cáncer de Hígado, este 30 de octubre, con el propósito de informar y sensibilizar a la población sobre los factores de riesgo y los síntomas más comunes, así como sobre la importancia de la prevención, haciendo hincapié en lo fundamental de llevar hábitos de vida saludables, mediante una buena alimentación y la práctica de ejercicio físico.

El cáncer de hígado es una enfermedad por la que se forman células malignas (cancerosas) en los tejidos del hígado. Se calcula que entre el 60 y el 90 por ciento de los hepatocarcinomas aparecen en personas con cirrosis, una enfermedad en la que el tejido sano del hígado es sustituido por tejido cicatricial cuyo origen puede ser vírico o no.
La principal causa no vírica de cirrosis, y por tanto de cáncer de hígado, es el consumo excesivo de alcohol. Otras causas menos frecuentes son: la hemocromatosis (acumulación de hierro en el hígado), la exposición a aflatoxinas (sustancias producidas por ciertos hongos que contaminan alimentos), la desnutrición, o la exposición a cloruro de vinilo (más relacionado con un tipo raro de tumor, el angiosarcoma).
Causa los siguientes signos y síntomas: Masa o bulto duro en el lado derecho debajo de las costillas, malestar en la parte superior derecha del abdomen, hinchazón del abdomen, dolor alrededor de la escápula derecha o en la espalda, ictericia (la piel y la parte blanca de los ojos se vuelven amarillentos), moretones o sangrados que aparecen con facilidad, cansancio y debilidad anormales, náuseas y vómitos, pérdida del apetito o sensación de estar lleno después de comer porciones pequeñas, pérdida de peso por motivos desconocidos, heces blancas, parecidas al yeso, orina oscura y fiebre.
Entre las medidas para reducir el riesgo de desarrollar cáncer de hígado, se incluye: el evitar el consumo de alcohol; medidas higiénico-dietéticas para la prevención y tratamiento de la obesidad; en caso de uso de jeringas, usar siempre una aguja limpia, sin compartir la jeringa con otras personas; uso de preservativo en las relaciones sexuales siempre que se desconozca si la pareja es monógama o si puede padecer hepatitis. Para más información acudir al Centro de Salud.


 
											 
											 
											