Por Noticias del Pueblito
Querétaro, Qro., 13 de junio de 2025.
El colectivo feminista Adax Digitales instaló este viernes un Tendedero de Deudores Alimenticios en pleno corazón de la ciudad, el Jardín Zenea, con la finalidad de visibilizar a los deudores alimentarios que incumplen con sus obligaciones hacia niñas, niños y adolescentes en Querétaro. La acción, cargada de simbolismo y fuerza colectiva, fue acompañada de un llamado urgente al Congreso del Estado para aprobar la llamada Ley Sabina.

En el tendedero fueron colgadas denuncias anónimas con nombres, testimonios y fotografías de hombres que adeudan pensiones alimenticias, algunos incluso con vínculos con cargos públicos. Las activistas señalaron que esta actividad tiene como fin denunciar la indiferencia institucional ante una problemática estructural que afecta directamente el desarrollo digno de las infancias.
“Tiene atrás una historia de madres autónomas que crían en solitario a sus hijos e hijas. Infancias que merecen vivir con dignidad. Y de un sistema que falla una y otra vez en obligar a los deudores a cumplir con su responsabilidad”, expresaron durante su posicionamiento.
El colectivo cuestionó que Querétaro continúe siendo un estado donde los deudores alimentarios pueden transitar impunemente, sin consecuencias reales por el incumplimiento de sus deberes legales y morales, incluso mientras sus hijos carecen de lo mínimo indispensable.
Adax Digitales también hizo un llamado directo al Poder Judicial, exhortando a jueces y tribunales a dejar de postergar sentencias y a actuar con perspectiva de infancia y de género.
“Exigimos que se deje de normalizar la deuda alimentaria como si fuera un asunto privado. Es un tema de derechos humanos. No es justo que haya niños y niñas viviendo sin lo básico, mientras sus padres se esconden, se burlan y mienten para evadir la ley”, señalaron.
Entre las principales demandas del colectivo están:
- La aprobación inmediata de la Ley Sabina en Querétaro.
- La implementación de sanciones efectivas para deudores alimentarios.
- Que el Estado garantice justicia real para las madres y sus hijas e hijos.
- Que se erradique la simulación institucional en los procesos jurídicos.
Finalmente, las participantes advirtieron que el tendedero no es un acto aislado, sino el inicio de una serie de acciones que buscarán presionar a las autoridades para que se reconozca la deuda alimentaria como una forma de violencia y abandono institucional.
“Ni un peso menos, ni un derecho menos para las infancias”, fue la consigna que cerró el pronunciamiento.
El evento concluyó en calma, pero con el compromiso firme de no desistir hasta que Querétaro sea un estado que garantice plenamente los derechos de las niñas, niños y adolescentes.